Post Week 7 - Saints

Defensa y carrera

Las señas históricas de identidad de los Chicago Bears siempre han sido la defensa y el juego de carrera. Y aunque contamos con Ben Johnson para desarrollar correctamente a Caleb Williams e implementar un ataque moderno y más equilibrado en el equipo, resulta refrescante saber que, aun en un mal día del quarterback, se pueden encontrar otras formas de ganar. No voy a exagerar y a decir que los fans de los Bears lo pasamos mal frente a los Saints, pero sí se puede afirmar que sufrimos más de lo necesario y que, aunque fuera brevemente, el Fantasma de las Navidades Pasadas se nos apareció brevemente al principio del tercer cuarto.

La primera mitad fue un monólogo de la defensa úrsida. Empezamos recuperando un fumble (provocado por Montez Sweat y recuperado por Gervon Dexter) en el primer cuarto que, lamentablemente, el ataque solo pudo traducir en tres escuetos puntos tras un aparatoso snap en el que nuestro center, Drew Dallman, fue incapaz de soltar el balón. Un Caleb nervioso y fallón no daba con la tecla, bastante azuzado por el “santo” Chase Young, y fue interceptado, aunque los Saints no lograrían sacar ventaja (fallarían un field goal).  En el segundo cuarto continuó el dominio defensivo de los Bears, que interceptaron a Rattler tras otro FG de Chicago. Es en este cuarto en el que llegan los dos touchdowns de los de azul y naranja, ambos de carrera y cada uno de uno de os dos RBs principales, que el domingo parecían los mismísimos Jahmyr Gibbs y David Montgomery. El primero de ellos fue el de D’Andre Swift, que firmó una actuación estelar con xxxxxxx yardas. El segundo, tras un punt de Nueva Orleans, de Monangai, que firmó su mejor partido de su corta carrera profesional con otras xxxxxx yardas.

Lamentablemente, el equipo no pudo evitar un postrero TD de los visitantes, yéndonos al descanso con un 20 a 7 en el luminoso que, aunque favorable, parecía corto tras lo que se había presenciado durante esta primera mitad. Y, aún peor, en la segunda mitad la posesión inicial era de los Saints y de nuevo lograron llegar a la zona de anotación local, poniendo un preocupante y apretado 20 a 14 en el marcador. Sin embargo, los Bears reaccionaron en el siguiente drive y se plantaron en la red zone del equipo de Luisiana, aunque una nueva penalización a Dallman por otro snap fallido nos hizo tener que conformarnos, de nuevo, con un field goal. La defensa también reaccionó y el siguiente drive de los Saints finalizó con una nueva intercepción, esta vez de Kevin Byard.

En el último cuarto Jake Moody (4 de 4 el domingo) lograría establecer el definitivo 26 a 14 y, aunque con la sensación de que se podría haber ganado de una forma bastante más tranquila y contundente, nos fuimos con la tranquilidad de sumar nuestra cuarta victoria consecutiva en un partido y oír de nuevo ese “Good better best” que suena a música celestial para los aficionados de los Chicago Bears.